Dirigir un negocio conlleva muchos tipos de riesgo. Algunos de estos peligros potenciales pueden destruir un negocio, mientras que otros pueden causar daños graves cuya reparación es costosa y requiere mucho tiempo.

Un riesgo se puede definir como un evento o circunstancia que tiene un efecto negativo en su negocio, por ejemplo, el riesgo de que le roben equipos o dinero como resultado de procedimientos de seguridad deficientes. Los tipos de riesgo varían de una empresa a otra.

El robo es un riesgo común que une a todos los minoristas. A diferencia de los que venden productos electrónicos u otros productos caros, las tiendas minoristas no suelen tener sistemas de seguridad de alta tecnología. Esto hace que el robo sea más probable y fácil de ocultar.

Para ayudar a combatir el riesgo de robo, es importante asegurarse de que su tienda esté equipada con cámaras de seguridad y un equipo de vigilancia listo para prevenir este tipo de bajas. Tener un programa de gestión de riesgos con la documentación y los registros adecuados puede marcar la diferencia cuando se trata de cuidar de tu comercio.

También puede ayudar tener un guardia de seguridad que pueda presenciar y registrar si ocurre un incidente, tanto de hurtos dentro de la organización como de los propios clientes.

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